Cuando presidentes democráticos en Latinoamérica asumieron el poder después de las dictaduras, ellos enfrentaron problemas por los crímenes de las dictaduras. Aunque los regímenes cometieron muchos crímenes de lesa humanidad, es difícil encarcelar a todos los culpables y mantener principios democráticos al mismo tiempo. Solo con el uso de la impunidad y olvido, nuevos sistemas democráticos pueden evolucionar y desarrollar después de una dictadura dura. Es por eso que durante una transición hacia la democracia, después de una dictadura muy dura, es esencial implementar políticas de olvido para mantener los principios democráticos en la nueva sociedad.
Los regímenes dictatoriales en Latinoamérica, especialmente en Chile y Argentina, fueron marcados por crímenes de lesa humanidad. Con la ayuda de la policía se prometió secuestrar y matar a los ciudadanos a lo largo de todo el país. Las dictaduras de Pinochet en Chile y la Junta Militar en Argentina sometieron a la población usando miedo. Además, el régimen de Pinochet terminó con la suma de 3.000 asesinados, 35.000 torturados, más de 1000 detenidos desaparecidos y alrededor de 200.000 exiliados (73). Además, se apoyó por la “Operación Cóndor” para practicar terrorismo en el Estado. Esta organización permitió la continuación sistemática de represión, especialmente en los casos de “tráfico de bebés” y “vuelos de muerte” en Argentina (86). Esta década fue marcada por la represión y violación de derechos humanos cual cada persona afectada.
Durante la transición de una dictadura a una democracia, es complicado acusar a los mandos intermedios por los crímenes sistemáticos que ocurrieron durante las dictaduras. Aunque la responsabilidad y la ejecución de las leyes son principios de democracia, la vida, la libertad y la felicidad, también lo son. Para tener una transición pacífica hacia la democracia es necesario implementar leyes y políticas de olvido que indultan los crímenes que fueron cometidos durante la dictadura. Ya que es imposible encarcelar a todos los mandos sin una rebelión, las leyes de impunidad deben ser implementadas por el gobierno.
Con la implementación de estas leyes se llevó a cabo la consolidación de la paz, y por eso pudieron avanzar hacia la democracia. Con la implementación de las leyes de impunidad, es más probable que los miembros de una dictadura abandonen su puesto ya que ellos no tienen miedo a la cadena perpetua. Además, hay otros problemas más urgentes que resultan de una dictadura como la inflación, la libertad de prensa y el acceso a la medicina y a la educación. Las leyes de impunidad permiten a una nueva democracia enfocar los esfuerzos del estado en busca de los desaparecidos y el desarrollo de su economía. Ya que los culpables cometieron atrocidades, es fácil querer hacer lo mismo a los culpables, sin embargo para apoyar la nueva democracia es importante instalar un sistema de ley sin crueldad, en lo cual se olvidan los crímenes de los mandos intermedios que siguen las órdenes de la dictadura. Por estas razones, durante una transición de una dictadura a una democracia necesitaba implementar las leyes de olvido y impunidad.
Comments
Post a Comment